Anunciarse a golpe de riñón

Se terminó la Vuelta a España 2008 y a pesar de que la afición española cuenta (nunca mejor dicho) con el primer ciclista fuera de serie desde los tiempos de Perico Delgado y Miguel Indurain, no parece que el asunto termine de enganchar a nivel de audiencias. Otra vez rozando el millón de espectadores, pobre bagaje para una prueba de reputada categoría.

Tal vez con una propuesta publicitaria como la que se hizo en Australia para dar a conocer las retransmisiones del Tour de Francia por la cadena SBS, la cosa hubiese ido mejor. O tal vez no. En cualquier caso, una curiosa acción en la que un individuo vestido de corredor profesional da pedales haciendo girar el poster que hay en la marquesina reforzando de esta manera el mensaje y haciendo que no pase inadvertido.