martes, 8 de septiembre de 2009

Comunicación para la crisis

Decía Gallardón a cuento de que el COI emitiera el informe de cara al anuncio de la próxima sede de los JJOO de 2016 que Madrid salía favorecida. La verdad es que resulta difícil de creer cuando su candidatura es la que peor nota ha recibido de las cuatro ciudades aspirantes. Está claro que cada cual es muy libre de manejar los mensajes corporativos de la forma que considere más oportuna, y no cabe duda de que el engaño (inducir a otro a tener por cierto lo que no es) es un recurso a la hora de gestionar una crisis. Por lo tanto, podría darse por buena la opción escogida por el alcalde a la hora de analizar el mencionado informe. Sin embargo, no sólo es que en cualquier manual de comunicación se recomiende reconocer la culpa como primer intento para salir de un apuro, es que además, utilizar una mentira para obtener un beneficio va en contra del espíritu olímpico que promueve valores tales como el juego limpio, la deportividad, la honestidad o el respeto. Mal lo llevamos si queremos que nos den las Olimpiadas si nos saltamos alegremente los conceptos básicos.

No hay comentarios: